No nos consta que haya personas nacidas o crecidas en Cataluña que no amen la Diada de Sant Jordi por encima de todas las cosas, ¿será algo implícito en el ADN catalán? Sea como sea es el día festivo por excelencia a pesar de ser laborable (absurdo, eh?), todo el mundo sale a la calle y compra rosas y libros como si no hubiera un mañana, y la verdad, que la literatura tenga un papel protagonista en esta fiesta nacional (y día de los enamorados en estas tierras) nos hace sentir muy y muy orgullosas.
Por eso, antes de salir a pasear y a autorregalarnos un libro os proponemos algunos de nuestros libros favoritos EVER (o al menos los que se nos ocurren en este momento), si os gusta nuestro blog os gustarán estas recomendaciones, palabrita!
- Nick Hornby: Juliet, desnuda. Anagrama, 2011. A pesar de ser una grande entusiasta de toda la obra de Nick Hornby (¿podría considerarse ya un mito generacional?) esta última novela suya me sorprendió gratamente. Annie y Duncan viven una vida tranquila hasta que se cruza en su camino un músico americano desaparecido desde hace años que desestabiliza su cotideanedad. Una vez más las relaciones tienen un rol principal en la historia pero en este caso se trata del fin de la amor, del por qué llegamos a desenamorarnos.
- Enric González: Todas las historias y un epílogo. RBA, 2012. Si aún no conocéis a Enric González ya es hora de remediarlo porque yo soy FANS, así en plural. No me he perdido casi ninguna de las columnas que antes escribía en el País y cuando leí sus Historias de Nueva York me enamoré de él perdidamente. Esta nueva edición reúne las andanzas de este periodista de raza como corresponsal en Londres, Nueva York y Roma. Una delicia.
- Mikael Niemi: Un rock'n'roll en el ártico. Destino, 2005. Esta pequeña joya de la literatura sueca que pasó bastante desapercibido en España trata de la amistad, del amor, del sexo y, sobre todo, de la llegada de la música pop a un pequeño pueblo en el norte de Suecia. Además, ofrece risas aseguradas.
- Sandro Veronesi: Caos Calmo. Anagrama, 2008. Veronesi es uno de mis escritores italianos favoritos, su novela La Fuerza del Pasado me encantó pero Caos Calmo superó mis expectativas. Pietro Paladini pierde a su mujer unos días antes de casarse y su vida da un giro de 360 grados: aparca su trabajo de alto ejecutivo para pasar sus días sentado delante del colegio de su hija. Una historia humanística que habla de cómo a veces buscamos maneras peculiares de superar los malos momentos. La película, con Nanni Moretti, también es muy recomendable.
Nanni Moretti en su papel de Pietro Paladini
- Jeffrey Eugenides: Middlesex. Anagrama, 2005. Sigo a este autor griego-estadounidense desde que publicó Las Vírgenes Suicidas (sí, la que llevó al cine Sofia Coppola) y su tercera novela va a ser mi libro de Sant Jordi 2013. Middlesex es uno de los libros que más veces he regalado (y eso dice mucho, no?), una historia que cuenta el viaje de una familia desde Grecia hasta Detroit y el viaje transformador de Calliope, su nieta, de mujer a hombre. Jeffrey, darling, te sigo la pista.
- Aarto Paasilinna: El Molinero Aullador. Anagrama, 2004. Autor finlandés que cautiva con sus personajes marginales y episodios fantásticos. La novela nos cuenta las dificultades con que se encuentra su protagonista, Gunnar Huttunen, para ser aceptado sin renunciar a su libertad. Una sátira sobre la mezquindad de la sociedad, de la exclusión y persecución de los que son "diferentes".
- Jack Kerouac: On the Road. Viking Press, 1957. Leí hace ya algunos años la edición americana original y no podía faltar en este ránking de ninguna de las maneras. Convertida en novela de culto y un clásico de la literatura norte americana, se podría decir que fue el manifiesto de la generación beat en los años 60. Un viaje autobiográfico a través de su alter ego Sal Paradise acompañado de Moriarty, Ginsberg y Burroughs.
- Mark Oliver Everett: Cosas que los nietos deberían saber. Blackie Books, 2009. Novela autobiográfica y musical del líder de Eels. Hijo del físico cuántico Hugh Everett , inventor de la teoría de los mundos paralelos, nos cuenta sin tapujos la serie infinita de desgracias por las que ha tenido que pasar desde el fallecimiento de su padre. Aún así, y entre la lagrimilla y el chiste, la novela, a medio camino entre el libro de autoayuda y el relato filosófico, se erige como un canto a la vida, a la esperanza y a la superación personal.
-Nick Hornby: High Fidelity. Penguin Books, 1995. Repetimos autor porque somos muy fans (bueno, y porque esta lista es un fifty-fifty de crochets!). Antes de ser película, Alta Fidelidad fue una novela, para el que no lo sepa todavía y crea que fue Stephen Frears el ideólogo de las aventuras y desventuras del desdichado Rob Flemming. Retrato de una generación, el protagonista, propietario de una ruinosa tienda de discos, sufre la llamada crisis de los 30 y tantos. Abandonado por su novia, termina encontrando cobijo solamente en su pasión por la música, pasando las horas creando listas interminables y ordenando su colección de discos de forma casi compulsiva una y otra vez. Altas dosis de cotidianeidad, masculinidad y sentimientos universales.
- Juan Marsé: Últimas tardes con Teresa. Planeta, 1977. La historia de amor entre la burguesa, rebelde e ingenua Teresa y el charnego ladrón de motos Pijoaparte ya forma parte del imaginario que retrata una época y una ciudad, Barcelona. Un must de la literatura patria.
Escuchando: Wrapped Up in Books de Belle&Sebastian